martes, 9 de octubre de 2012

Mujer

 
"La flor más bella, no es aquella gloriosa y vanidosa. No baila con el viento.
Es la diosa de las almas devastadas... La dulce ninfa de colores humildes, como Dríada.
 Sin pinturas y joyas que pintan los ojos pero duermen el alma.
 Aquella pequeña, perfecta en discresión y calma .
 La flor más bella es aquella que con una tímida mirada te atrapa, te saca una sonrisa y pinta de colores a tu muerto corazón.
 Flor dulce y delicada. Mujer de sueños y esperanzas. Capullo maduro, reluciente, floreciente.
 Grandioso el tiempo en que el Sol pretendió a la Luna y naciste tú; Estrella de mares y agua de nubes.
 Flor deliciosa, novia cautivadora, de perlas naturales y espejos agradables; Sulamita de piel rosácea y sueños misteriosos.
 Baúl de secretos y galaxia de besos.
 Amiga confiable, hija respetable, mujer pura y madre de ensueños.
 Sus besos son cantos de amor y sus abrazos un apagar del dolor.
 Paz y amor inspiran tu voz.
 Ni inciensos ni perfumes igualan tu fragancia, eres pura elegancia, toda de gracia. Pintada al natural, un blanco sin igual.
 Pureza es ésa, que a ti te impera.
 Toda tu era forma un castillo, sin densas tinieblas, tú nunca tiemblas.
 No temes lo que no eres, toda diferente.
 Tu blancura no es excusa, es tu dulce pluma, es la espuma de tu pelo y tus dedos.
 Nadie la quiebra, pequeña en la tierra.
 Aladas sus piernas, un cuerpo angelical, espera pureza en el altar, trinar final.
 Buscan sus labios un alabar constante, no se acerca a las rosas, que aunque bellas, peligrosas.
 Sus dulces pétalos se colman de azúcar, no se contamina y al bien se encamina.
 Esta es la mujer fiel, la mujer zapaz, que reparte paz y busca amar."

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